En Tindouf nos esperaban transportes que nos llevarían a las 4 Wilayas, distritos, íbamos a la más próxima, en autobús, por carretera, a las otras Wilayas se va en camión y por carretera sólo un tramo, pero es tan emocionante que no importa que al autobús le falten cristales y sea una noche heladora.Llegamos a Smara, subimos en un camión y nos reparten por Dairas, pueblos, llaman por megafonía a las familias que vamos a visitar( familias de los niños que acogemos en verano).
La espera fue corta, pero hay muchas sensaciones, rodeada de casas de adobe y de haimas, el suelo arena , y el cielo estrellado, no hay luz, excepto mi linterna, no puedes pensar, sólo sientes que estas en otro mundo. En unos minutos llegan hombres con turbante, señoras tapadas y niños gritando nuestros nombres, nos abrazan, poco a poco va llegando la familia, padres, hermanos,.., te quieren dar la bienvenida y te llevan a casa, un único espacio iluminado por un fluorescente conectado a una batería, el suelo es arena y encima una alfombra, allí nos acomodan, el suelo hace la vez de silla o sofá, toda la familia se sienta a nuestro alrededor, mientras un joven hace te. Donde hemos estado sentadas nos cubrimos con mantas y dormimos todos, o al menos lo intentamos pues nosotras estabamos extasiadas y el suelo es duro.Pensábamos:Qué hacemos 5 días, sin tele, sin cine, sin….?, pero cinco días se quedan cortos, a pesar de la dura situación sin ducha o un retrete , y no por las cosas que hay que ver, hospitales tristes, poco higiénicos y sin medios, escuelas que no disponen de material escolar suficiente, ni sillas ni mesas para todos los alumnos, ni cabras que comen las sobras, tampoco es por experimentar conducir un Land Rover sin frenos, sino por la calidad de las personas, te dan lo que no tienen, cantan y bailan para ti aún sin fuerzas, se gastan la última gota de gasolina en llevarte a pasear y los niños sólo desean tu mano y se conforman con un caramelo. Toca el alma y el corazón.
2 Comentarios
Muy bueno
Gracias
🙂
Que bonito